Quizá no tendré que estar así, te marchaste, te recordé y te sigo recordandote con esa sonrisa que alegraba todos mis días, con esos abrazos que eran los más importantes que alguien me podia dar y sin dudas tus palabras siempre me ayudaban y me siguen ayudando. Se que tu duelo todavía no lo pase, te recuerdo con una carcajada. Perdona mi debilidad pero cada vez que te nombran se me cae una lágrima, siento un vacío inmenso dentro mio, que se que no lo voy a poder superar por nada en el mundo. Tal véz no asumo tu partida y se que no, se me hace tan triste no volverte a verte, nada va a ser como antes, ya nada será igual, ni cada cumpleaños mío, ninguna fiesta, nada de nada. 
Fuiste, sos y serás la mejor persona que conocí en mi vida, ese abuelo y la persona con la imaginaba nuestro casamiento. Fuiste todo.
Gracias por todos los momentos vividos fueron únicos, gracias por el cariño tuyo, por los abrazos y por ser así como fuiste conmigo.